Tengo la necesidad imperiosa de escribir
ya no pasa por las ganas o el querer contar/plasmar algo en particular
Necesito escribir
Escribir como ejercicio para intentar que suelte la sopa
Se siente como vomitar
La ansiedad se siente monstruosa. Cada dia que pasa parece sentirse un poco más; un poco mas pesada, mas inbancable, mas hastiada, más sofocante. Falta el aire, cuesta respirar. Me pregunto ¿Por qué seré tan reacia a aprender ejercicios de respiración de una buena vez por todas? Casi como si inconscientemente me resistiera a acceder a aquello que me va a ayudar a acabar con el síntoma. Casi como si la ansiedad se agarrase con todas sus fuerzas del barandal y se resistiese a ser sacada, a patadas.
Estoy segura que hay enfermedades mentales mucho mas heavys, pero aun asi me atrevo a decir desde mi lugar que la ansiedad es un trastorno bastante agotador y devastador. Demanda MUCHÍSIMO cada segundo que estoy despierta. Cada segundo es una constante lucha, una pulseada que hay que mantener, una fuerza que no podes aflojar, porque a más cerca estés de derrotarla, más cansancio mental acumulás.
Se siente como una guerra sin fin.
La guerra en la que el premio es VIVIR para dejar de SOBREVIVIR
Me falta el aire, el cigarro no va más. El eterno compañero, el cigarro, no está más.
Discutimos, nos amamos pero me hace mal.
"Me duele, me duele, me duele pero me duele TAN bien" Yemen, Kase o
https://www.youtube.com/watch?v=YGICYKnIm2A
NECESITO QUE PARE DE DOLER
El clonazepam últimamente se me caga de risa en la cara
El clona abajo de la lengua representa un anhelo. Un anhelo muy fehaciente.
El anhelo de dejar de sentir dolor, solo por un rato.
Quien soy yo para juzgar a aquel que con el mismo propósito tan real, tan desgarrado y desesperado, elije intentar lo mismo pero con otra sustancia, vicio, adicción.
Mientras mi dedo señala tan livianamente, tan fácil, tan rápido si al final estamos todos en la misma.
En la misma búsqueda, en el mismo sentir, sintiendo el mismo sofoco que siento yo.
Cada vez que señalo, el dedo no solo me apunta a mi, sino que a su vez el dedo me nubla la empatía.
Santísima empatía, duele tanto tenerla en mi tren, pero bendita sea que es la única que me permite entender, o al menos intentar. O mejor aun, me anima a preguntarme qué está pasando a mi alrededor, me invita a intentar dilucidar lo implícito. Me invita a mirar con las gafas puestas del amor 😎
No hay comentarios:
Publicar un comentario